Pagar 609 millones de pesos y crear un código interno para frenar cualquier conducta contraria a la libre competencia. Esa es la multa que cumplirá Farmacias Ahumada luego de que el Tribunal de la Libre Competencia aprobara el acuerdo que suscribió con la Fiscalía Nacional Económica.
No sé a usted, pero a mí, este “castigo” por ponerse de acuerdo con otras farmacias para subir los precios a más de doscientos remedios no me parece suficiente.
Seamos claros ¿sentirá pagar 600 millones una empresa que mensualmente se embolsa miles de millones? NO lo creo. ¿Hay alguna certeza de que estos arreglines (colusión) no vuelvan a repetirse? NO ¿Habrá alguna compensación económica para los pobres usuarios asaltados por las farmacias? de nuevo…NO.
Hoy escuchaba en la radio que la única enseñanza que dejan este tipo de situaciones es que es mucho más rentable delinquir, que respetar la ley.
Con todo el respeto que me merece la Constitución, me parece que es la pura y santa verdad.
Sin embargo, todavía queda un camino para manifestar la rabia: el “Castigo social” .
Seguir diciendo, en todos los espacios y de todas las formas posibles que no estamos de acuerdo con lo que ocurre; seguir prefiriendo las farmacias chicas a estas cadenas de ladrones; seguir exigiendo a nuestros representantes que se la jueguen por defender los derechos de los chilenos.
Ya lo dice el refrán “Si quieres cambiar el mundo comienza por ti mismo”. No nos resignemos.
